En los diversos objetivos analizados puede observar que en gran parte si se potencian espacios en donde los niños y niñas interaccionan con otros, (desarrollando habilidades con sus pares) promoviendo de esta manera el desarrollo del pensamiento y abordando el lenguaje oral en lo que ellos puedan expresar.
En las orientaciones valóricas las bases curriculares se enmarcan en principios y valores que inspiran la constitución política y en lo que respecta a la función integral de los niños, se logra identificar que si se propicia un interés del principio pedagógico de singularidad en donde cada niño es un ser único, en unidad de ambientes saludables.
Así las bases curriculares en su ámbito de formación personal y social nos brindan diferentes oportunidades progresivas, frente a una alimentación equilibrada y a diferentes actividades recreativas que el establecimiento puede optar, contribuyendo a un bienestar y a una buena salud personal de cada niño y niña.
Por un lado en lo podemos observar en las diferentes situaciones de aprendizajes, lamentablemente el juego no tiene un sentido fundamental y tristemente no se cumple el objetivo de los rincones de sala orientados en la propulsora María Montessori ya que el material está, pero los niños no tienen el interés de buscar nuevos métodos e intereses ya que saben que frente a esta situación se encontraran con un lamentable NO y esto refleja que el juego no es un método de aprendizaje para ellos. Por otro lado lo que frobel planteaba acerca de la importancia del juego en la formación de los niños acá se observa que los niños no desarrollan logros en relación con sus aprendizajes relacionados, ya que los niños de hoy en día están siempre frente a un NO, porque el establecimiento esta tan escolarizado que tiene proyectos y metas que cumplir con ellos, y esta parte no se desarrolla en ellos logrando en ellos una frustración frente a estas situaciones.
Principio de bienestar Sí se generan criterios y experiencias en donde los niños si se sienten cómodos, confiados y queridos (ya que hacen saber sus sentimientos y pensamientos) lo que demuestra sus capacidades, características e intereses a partir de la buena incrementación de su vocabulario siendo esta parte fundamental del proceso y desarrollo evolutivo de cada uno de ellos.
“Toda situación educativa debe propiciar que cada niña y niño se sienta plenamente considerado en cuanto a sus necesidades e intereses de protección, protagonismo, afectividad y cognición, generando sentimientos de aceptación, confortabilidad, seguridad y plenitud, junto al goce por aprender de acuerdo a las situaciones y a sus características personales. Junto con ello, involucra que los niños vayan avanzando paulatina y conscientemente en la identificación de aquellas situaciones que les permiten sentirse integralmente bien, y en su colaboración en ellas”.
Principio de bienestar Sí se generan criterios y experiencias en donde los niños si se sienten cómodos, confiados y queridos (ya que hacen saber sus sentimientos y pensamientos) lo que demuestra sus capacidades, características e intereses a partir de la buena incrementación de su vocabulario siendo esta parte fundamental del proceso y desarrollo evolutivo de cada uno de ellos.
“Toda situación educativa debe propiciar que cada niña y niño se sienta plenamente considerado en cuanto a sus necesidades e intereses de protección, protagonismo, afectividad y cognición, generando sentimientos de aceptación, confortabilidad, seguridad y plenitud, junto al goce por aprender de acuerdo a las situaciones y a sus características personales. Junto con ello, involucra que los niños vayan avanzando paulatina y conscientemente en la identificación de aquellas situaciones que les permiten sentirse integralmente bien, y en su colaboración en ellas”.
Se observa que las planificaciones están insertas las necesidades educativas de los niños logrado así metas dispuestas que los alientan y ayudan a ser los protagonistas de sus propios avances y aprendizajes. En el cual se fundamentan espacios como verdad, justicia, solidaridad y libertad. Logrando así el fin de la educación parvularia.
“La Educación Parvularia como primer nivel del sistema educativo busca como fin:
Favorecer una educación de calidad, oportuna y pertinente, que propicie aprendizajes relevantes y significativos en función del bienestar, el desarrollo pleno y la trascendencia de la niña y del niño como personas. Ello, en estrecha relación y complementación con la labor educativa de la familia, propiciando a la vez su continuidad en el sistema educativo y su contribución a la sociedad, en un marco de valores nacionalmente compartidos y considerando los Derechos del Niño”.
