Actualmente uno de los
elementos más significativos que permiten garantizar una educación de calidad
es el buen desempeño de los docentes dentro de las aula, tal como señala
McKinsey[1],
la evidencia disponible a nivel
internacional muestra que el principio impulsor de las variaciones en el
aprendizaje escolar es la calidad de los docentes; ya que la calidad de un
sistema educativo tiene como fortaleza la calidad de sus docentes los que deben
ser personas competentes que se
desempeñen bien en todas las áreas pedagógicas, por lo tanto esta es la única manera de elevar
la enseñanza.
En Chile y en todos los
países “la educación durante toda la vida se presenta como una de las llaves de
acceso al siglo XXI”[2]
(Delors, P.16) porque claramente la educación es un instrumento indispensable
para que la humanidad pueda progresar hacia ideales de paz, libertad y justicia
social, puesto que este desarrollo constituirá lo que plantea el marco
curricular que debe tener en cuenta las necesidades, intereses y
características de los niños y niñas para mayor autonomía y capacidad de juicio
responsable de los estudiantes.
La directora del centro
de perfeccionamiento, experimentación e investigaciones pedagógicas (CPEIP)
Violeta Arancibia plantea que: “la demanda que tiene un profesor en la escuela
pública del siglo XXI en Chile no tiene nada que ver con la de hace 20 años
atrás”[3]
por qué claramente los niños hoy en día son de la tecnología y la forma de
aprender también necesita de la tecnologías dentro del aula, es por este motivo
que necesitamos que los docentes deben actualizarse, deben ser capaces de
interactuar con las tecnologías, deben capacitarse para entregar de la mejor manera
posible los contenidos. La UNESCO considera adecuado el desarrollo y las
capacitaciones a los docentes para una adecuada educación de calidad, lo cual
va a “orientar a desarrollar el potencial humano de los niños y niñas, para que
de manera crítica y creativa contribuyan progresivamente a la construcción de
una sociedad más justa y más humana”[4]
Podemos señalar, que en
la escuela encontramos una solución pedagógica, para un tema que preocupa la
educación del siglo XXI que es la importancia de supervisar los recreos de los
alumnos, como equipo consideramos que se puede implementar en los recreos
“rincones” en los que agrupemos diversas disciplinas para educar y entretener a
los alumnos, de manera que podemos evitar el bullying que esta alcanzando un
alto porcentaje dentro de los establecimientos educacionales.
La educación es
claramente todo lo que la humanidad ha aprendido sobre sí mismo. Jacques Delors
al finalizar el informe a la UNESCO de la comisión internacional sobre la
educación para el siglo XXI, imitando al poeta juan de la fontaine, elogio:
“Pero el padre fue sabio
Al mostrarles, antes de
morir, Que la educación encierra un tesoro”.
[1] Informe Mckinsey:” Cómo hicieron los sistemas educativos con
mejor desempeño del mundo para alcanzar sus objetivos”, M. Barber, M. Mourshed,
julio de 2008
[2]Delors, J. (1996). “La educación encierra un tesoro: Informe a
la UNESCO de la Comisión Internacional sobre la educación para el siglo XXI,
presidida por Jacques Delors”. Santillana, UNESCO.
[3]Prado, N. (2012) Revista de Educación, N° 352
[4] Ministerio de Educación, Harald Beyer Burgos (2012)
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